Motivación

Hay mucha gente que me mira como si estuviera loca cada vez que digo que mis planes para el fin de semana, en más de un 50%, son ir a entrenar. Otros no se explican como tengo fuerza de voluntad para levantarme antes de mi hora y hacer mi entrenamiento, darme una ducha, tomarme un buen desayuno e irme a trabajar como alma que lleva el diablo. Algunos piensan que me estoy pasando cuando el viernes a las 3 de la tarde salgo escopetada del trabajo porque tengo que estar lista a las 4.30 para ir a mi Escuela de Boxeo y pasar una hora y media sudando la gota gorda.

Esto es como cuando tienes perro. Nadie te comprende salvo que hables con alguien que tiene uno.

La clave es la motivación. Es hacer de esto una forma de vida. Es sentir las buenas sensaciones que el deporte te da. Es ver como avanza tu cuerpo, tu resistencia y tu mente.

Soy humana. Me canso. Hay días que estoy para el arrastre. Nadie dijo que combinar el deporte de forma constante con una vida llena de carreras, de esas carreras que no cuentan en la marca de atletismo, fuese fácil.

Hay días en los que me daría por vencida. En los que la noche anterior no he pegado ojo. En los que tengo tantas cosas en la cabeza que me pierdo al contar el número de repeticiones de una serie. ¡¡Como todo el mundo!! Pero ¿sabes una cosa? Dedico 30 minutos a entrenar, o levanto el culo del sofá y me preparo para mi clase de boxeo, y todo eso pasa a la historia. La energía invade mi cuerpo, la sensación post entrenamiento mete aire en mi cabeza y logro callar esa vocecita dentro de ella que tiraba de mi para no mover nada más que el dedo que cambia de canal.

En mi caso me motivan un montón de cosas para seguir. Me motiva ver que soy capaz de ser constante. Me motiva aprender un poco más cada día, y todos los deportes te enseñan; desde como tener la postura correcta hasta ser capaz de organizar tu tiempo. Me motiva mirar fotos de hace un año y ver como mi cuerpo ha ido cambiando, como los tiempos de mis medias maratones han ido mejorando, como las palmas de mis manos llegan al suelo o como ya soy capaz de hacer mas de dos fondos seguidos sobre las puntas de mis pies apoyada en los puños. Todo avance motiva y a mi también me pasa. Me motiva ser uno más, que no me vean como la chica floja con la que no se puede contar para hacer unas series, bajarse la pista más negra del mundo o apuntarse la primera a las carreras. Estoy convencida de que esto es porque mi padre quería un niño y me hizo todo terreno, con lazos pero todo terreno.

Encuentra tu deporte. Encuentra ese que te hace engancharte, busca tu hueco, trabaja y no pares. Te aseguro que verás como la motivación viene sola...y tu aventura se llenará de ella.

Ya solo me queda desearte ¡suerte!



¡Crea tu página web gratis! Esta página web fue creada con Webnode. Crea tu propia web gratis hoy mismo! Comenzar